En García y Manjarrez somos especialistas en análisis clínicos. En este espacio escribiremos de cada uno de ellos para que tengas información de primera.
Si tiene problemas para respirar, su médico puede recomendarle algunas pruebas para determinar la causa.
Algunos miden cuánto aire inhala o exhala o cuánto oxígeno pasa de sus pulmones al resto de su cuerpo, mientras que otros pueden mostrar si tiene una infección u otro problema que le impide respirar bien.
Espirometría. Esta es la prueba pulmonar más simple y común. Usted inhala y exhala lo más fuerte que puede a través de un tubo, y su médico mide el volumen de aire exhalado en momentos específicos durante una exhalación enérgica y completa después de una inhalación máxima.
Puede ayudar a diagnosticar afecciones que afectan la cantidad de aire que pueden contener los pulmones, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Los médicos realizarán pruebas de espirometría antes y después del albuterol y el broncodilatador y verán si hay una mejora con los medicamentos que se observa en el asma, pero no en la EPOC.
Prueba de gases en sangre: esta prueba de sangre mide los niveles de pH de la sangre, así como los niveles de oxígeno y dióxido de carbono, que son útiles como medida de la eficiencia y la salud de los pulmones.
Conteo sanguíneo completo (CBC): esta prueba se utiliza para evaluar el estado de las células sanguíneas y detectar anemia.
Panel metabólico integral (CMP): el CMP se utiliza para medir los desequilibrios químicos y electrolíticos, así como la función de los órganos.
Análisis del líquido pleural: esta prueba examina las causas de la acumulación de líquido en la capa pleural (revestimiento entre la pared torácica y los pulmones) y si el líquido se debe a cáncer o infección.
Biopsia de pulmón: este procedimiento le permite a su médico evaluar el daño al tejido pulmonar y si las células son cancerosas.
Toracotomía: esta es una incisión que utiliza su cirujano para evaluar y operar su pulmón.